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31 de octubre de 2007

Poema de la distancia

El siguiene poema lo soñé, literalmente. Era como si recibiera un dictado y cada imagen se representaba visualmente también en el sueño. Es la primera vez que me pasa y pasó definitivamente, por el alto nivel de pasión que actualmente siento:

Poema de la distancia

Guardo silencio para darle cuerda
al radar de los kilómetros
de muros, las ventanas y las cosas,
los objetos que los humanos llaman
bienes hasta el otro lado del mundo,
donde los hombres se dedican a arcar
productos sin sexo, otorgando
monedas por miradas a
seres felinos ausentes de toda batalla

Atravieso la materia de una bomba atómica
que será lanzada en una ciudad fértil de amor
para saciar el regocijo de magnates
necios, cariñosos que creen que hacer
el amor es coger un billete
llegar al orgasmo más económico y pobre,
libranos Señor de tanta suerte

Primero guardo silencio y te siento,
sí, te siento entera por fin,
luego oscura, completamente vaga por fin,
irremediablemente tuya eres, y siento
como te desplazas del salón a la
almohada, escalando calles de palabras,
mi radar es un fomento a la lectura

De manto es tu silencio que
me dice soy tuyo, de nadie más
que el viento tuyo, duro, sólido palacio
donde se ajustan las fronteras del mundo,
vuelan listones, tuercen las palmas,
ahuyentan todo descanso a los sensonres
del festín de la vida es sentire donde no estás

Solo el que ha estudiado
en una escuela pública de olvidos
sabe cómo se pierden las sílabas
ignorantes de epidermis,
por esto guardo silencio, mi mejor clase,
la que derrumba las hectáreas
y tolera la geografía particular
de tus barullos, que me dicen hola, adiós,
hola, adiós, hola adiós,
adiós, adiós, adiós,
como si replegaras tus astas de manos

El radar es un acuerdo de amantes,
de pétalos que decidieron sol con otro acento,
en otro idioma indiferente
al que toca, al que siente
el poniente humor del amoroso

Vuelvo, guardo silencio y te siento,
ciego, te veo
sordo, te escucho
mudo, te hablo,
tanto me bastan los segundos de tacto
de encontrarte las pieles del alma
escanciada por las sábanas

Como ecos sin resonancia, cada abrazo
cada piedra se hace mía, se hace
aire de mis venas, células de un cuerpo
más diurno que pasa y te encuentra
más arena que invisible, es el amplio relieve
conformado por árboles cuando no contienden
más por la estulticia de sonidos
que se asoman y reclaman asiento, piel, oídos

Separados de los afectos
habrá tiempo apenas para
recoger el sigilo, más fuerte y maduro,
así ganaremos silencio,
así aguardaremos tranquilos.

29 de octubre de 2007

Inundemos la ciudad de servibellas

¿Qué si escribimos en las servilletas de la ciudad, papel del baño o papel gratis citas, textos, poemas, aforismos o una idea que inspire a otro? Podemos dejarlas en las bancas, los camiones, los asientos, las paredes, las cabinas telefónicas, los templos, los jardines, todos aquellos puntos estratégicos que esperan ser develados en su secreto.

27 de octubre de 2007

I'm silence

Tengo muchas cosas por escribir. No son necesariamente anécdotas recientes, lo que quiero hacer es un recuento de mis estructuras mentales transindividuales, si hablara desde un punto de vista sociocrítico... o simplemente un examen de vida. Hoy desperté recordando un montón de historias.

Es preciso alejarse para estar más cerca. El pasado aparenta un hondo silencio. La aurora de un principio que no termina. Pero el pasado siempre se nos presenta majestuoso y sonoro, comensal del silencio:
Aprender a escuchar, aprender a escuchar el silencio y el sonido van a provocar una autoalteración. Esta es como es sabido, la enseñanza que nos brinda el músico norteamericano John Cage quien de modo magistral enseñó a escuchar las formas del silencio. Unas formas que requieren destruir la grafía del lenguaje, de la memoria, para mostrar que silencio y sonido siempre están en continuidad.1

25 de octubre de 2007

Elogio de la Locura

Decidme: ¿A quién amará aquel que se odie a sí mismo? ¿Con quién concordará aquel que discuerde de sí mismo? ¿Podrá complacer a alguno aquel que sea pesado y molesto para sí? Creo que nadie lo afirmará, a menos que sea más estulto que la misma Estulticia.

Si prescindieseis de mí, además de no poder nadie soportar a nadie, todo el mundo sentiría hedor de sí, asco de sus propias cosas y repulsión de su misma persona. Tanto más cuanto que la naturaleza, en no pocas ocasiones más madrastra que madre, ha dispuesto el espíritu de los mortales, sobre todo de los pocos sensatos, de suerte que cada cual se duela de lo suyo y admire lo ajeno, de lo cual viene que todas las prendas, toda la elegancia y todo el atractivo de la vida se echan a perder y se desvanecen. ¿Qué vale la hermosura, principal don de los dioses inmortales, cuando se corrompe con el morbo de la melancolía? ¿Qué es la juventud si la envenena el agror de una senil tristeza?

En fin, ¿qué podría realizar el hombre con belleza (y así conviene que lo haga todo, pues ésta no sólo es fundamento del arte, sino de cualquier obra) en cualquier función de la vida, sea en beneficio propio o en el de los demás, si no le tendiese la mano el Amor Propio, con quien me une fraternal lazo? Y añadiré que se esfuerza en sustituirme en todas partes. ¿Y qué tan necio como satisfacerse y admirarse de uno mismo? Por el contrario, si se está descontento de uno mismo, ¿podrá hacerse algo gentil, gracioso y digno? Suprimid este condimento en la vida y en el acto se helará el orador en la defensa de su causa, el músico no dará placer a nadie con sus ritmos, el histrión, a pesar de sus gestos todos, será silbado, el poeta y sus musas serán objeto de risas, el pintor y su arte serán diseñados y el médico y sus fármacos caerán en la miseria. En fin, tendremos a Tersites en vez de Niceo, a Néstor en vez de Faón; en vez de Minerva a un cerdo, en lugar del locuaz al balbuciente y en el del cortés al patán. Tan necesario es que cada cual se lisonjee a sí mismo y se procure una pequeña estimación propia antes de que se la otorguen los demás.

En suma, como quiera que la principal parte de la felicidad radica en que uno quiera ser lo que es, contribuye a ello grandemente mi querido Amor Propio, haciendo que nadie se duela de su figura, del talento de la estirpe, del estado en que se halla, de la educación ni de la patria, de suerte que ni el irlandés ansía cambiarse por el italiano, ni el tracio con el ateniense, ni el escita con los de las islas Afortunadas. ¡Oh singular solicitud de la naturaleza que en tan grande variedad de cosas todas las iguala! Dondequiera que se retrae en algo de otorgar sus dones, allá acude el Amor Propio a añadir un tanto de los suyos. Aunque esto que acabo de decir ha resultado una necedad, porque estos últimos son los más copiosos.

Del capitulo XXII, "Elogio de la Locura", de Erasmo de Rotterdam.

22 de octubre de 2007

Ghost Dog: The way of the samurai

Si alguien busca la salud, pregúntale si está dispuesto a evitar en el futuro las causas de la enfermedad; en caso contrario, abstente de ayudarle.
Sócrates

Tengo muchas cosas que me he guardado y quiero depositar aquí. Hoy fui a donar sangre. Es una experiencia que antes no había vivido. Mi abuelo está internado por una fractura que sufrió en el femur. El miércoles será operado y al parecer las cosas no son tan graves, sin embargo necesita sangre para la operación. Así que sin pensarlo dos veces, asistí el día de hoy al hospital con mi tía Rosa.

Lo primero que debes hacer es tomar una ficha y esperar tu turno. Una vez que eres voceado, entras a un pequeño cubículo donde un doctor te hace un interrogatorio para cerciorarse de que eres apto para donar. Después, las enfermeras te toman una pequeña muestra de sangre para verificar que realmente tu sangre es sana. Justo cuando esperaba los resultados de la primera extracción, pensaba en el paralelismo entre el cuerpo y la mente sana. No puedes ayudar a alguien si tú mismo no estás sano, física y mentalmente. De este modo, un consejo o medio litro de sangre son ambos por igual, luz.

Hace como un mes participé en el árduo trabajo de claquetero cinematográfico:



Desde las 7 a.m. hasta las 10 p.m. Es un trabajo demandante e interesante al mismo tiempo, ya que estuve muy cerca del proceso de rodaje en escena. Esta colaboración la hice con los chicos de 12 en 1, donde también estoy participando actualmente en el Departamento de Arte para la producción del mes de noviembre.

La semana pasada mi amiga Colette vino a visitarnos desde Carolina del Norte. Ella estuvo aquí el año pasado trabajando con mi hermana en Intercolonias, conociendo junto con más estudiantes gringos, un poquito de la vida en México. Además de emotivo, creo que nuestra amistad se consolidó.

El viernes hice una pequeña reunión/fiesta en mi casa, por un lado para ver a mis amigos de la facultad y por otro para despedir a Colette. Matamos dos pájaros de un tiro, porque al día siguiente sería el cumpleaños de Lenin. Más tarde fuimos cerca del edificio de la U. de G. para despedir finalmente a Colette.

El sábado fui al Mirador de la Barranca de Huentitán, con el grupo de producción de 12 en 1. Ahí grabarán una de las escenas del corto. Más tarde fui con mi familia al entierro de la mamá de la madrina de mi hermana...

Esa misma noche vi la película Ghost Dog: The way of the samurai, que no había visto completa. Es muy Jarmusch. Una ridícula pandilla de mafiosos italianos decide matar a uno de sus propios asesinos, después de que cometiera "mal" un crimen. Los diálogos son fabulosos. Hay escenas que me hicieron reír casi hasta llorar. Así como algunas partes del libro que leía el protagonista -Forest Whitaker- que emanaban silencio:

Ghost Dog: The Way of the Samurai is found in death. Meditation on inevitable death should be performed daily. Every day, when one's body and mind are at peace, one should meditate upon being ripped apart by arrows, rifles, spears, and swords, being carried away by surging waves, being thrown into the midst of a great fire, being struck by lightning, being shaken to death by a great earthquake, falling from thousand-foot cliffs, dying of disease or committing seppuku at the death of one's master. And every day, without fail, one should consider himself as dead. This is the substance of the Way of the Samurai.
Y hablando de libros... ayer por la noche terminé de leer Amuleto de Roberto Bolaño. Tendría que hacer toda una entrada al respecto sobre este libro y este autor. Antes de dormir, quise comenzar a leer Seda de Alessandro Baricco, pero no solo comencé a leerlo... ¡Lo terminé de leer! Es riquísimo para el cuerpo y el alma tener tantas emociones sublimes en estos lapsos... Al dormir, tuve uno de los sueños más largos que he tenido en estos meses...

La última vereda que trazaré hoy, antes de irme a hacer un examen médico para enviar a la Embajada de Francia, es que no escribía directamente (como ahora) en este par de meses porque estaba saliendo con alguien. Ahora hemos quedado como amigos, el tiempo que pasé con ella lo disfruté pero las veredas nos llevan a otros caminos.

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